¿ MISTERIO Y MENOSPRECIO, DIVINOS ?

¿ MISTERIO Y MENOSPRECIO, DIVINOS ?

Si Dios es Amor...¿Donde está el Misterio?.

Amor significa: transparencia, claridad, luz, verdad, bondad, ternura, tolerancia, paciencia, misericordia, caridad, piedad, compasión, cariño, guía, salud, bienestar, buena convivencia, solidaridad, dar sin recibir nada a cambio, voluntad, aguante, perdón, etc. etc.

Misterio significa: desconocido, oculto, tabú, inalcanzable, incomprensible, etc. etc.

¿Es que nosotros, como hijos de Dios y hechos a “su imagen y semejanza”, estamos limitados?…..¿Al igual que la especie animal, vegetal y mineral que existe en el planeta Tierra?……..¿Somos robots o...seres con “libre albedrío”?….¿Estamos calificando el Amor de Dios como, algo oculto (ocultismo quizás)?.

¿QUÉ TIENE DIOS DE OCULTO?.

Es Dios tan transparente que somos incapaces de “visualizarlo” y (sin embargo) está “en nosotros” y a nuestro alrededor.

Claro está; para poderlo hacer visible es necesario que “nosotros” (no Él), seamos más transparentes y no...tan “ocultos u oscuros”. Cuando uno, anda en la Luz, puede ver a Dios y comprueba que...no hay ningún “misterio en Él” ni en ninguna de sus “continuas Creaciones”.

¡¡¡¡¡¡¡LA OSCURIDAD Y EL MISTERIO ESTÁ EN NOSOTROS!!!!!!!.

Jesús-Cristo dice… “no se puede servir a dos amos a la vez, porque se odiará al uno y se amará al otro, no se puede servir a Dios y a las riquezas”.

Sigue diciendo… “cuan grande es, la oscuridad que hay en ti”.

Jesús-Cristo...no habla de su Padre como un espíritu oculto, misterioso, inalcanzable, etc., Él dice… “el que me ha visto a mí, a visto al que me envió, mi Padre, Él y Yo somos uno”.

¿Donde está el misterio?; los discípulos, tenían delante suyo a Dios mismo, algo muy distinto es que, por su falta de fe (y por consiguiente) el no andar en la Luz (pues, aunque estaban con Cristo, no andaban en la Luz, de lo contrario, no le habrían abandonado); no fueron capaces de distinguir a Dios en Jesús-Cristo.

Tengamos presente que Pedro dijo… “Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios vivo” y Jesús le respondió… “ni sangre ni carne te lo han revelado, sino mi Padre que está en los cielos”; todavía hay otro ejemplo en el evangelio de Juan, creo que es Felipe quién dice a Jesús… “en esto sí que sabemos que vienes de Dios y que eres el Cristo, el Hijo de Dios” pero, en ningún momento percibieron que Cristo y Dios eran el mismo; fue necesario que vivieran la experiencia de la Resurrección y de la venida del Espíritu de la Verdad para que llegasen a comprender la Unión existente entre DIOS-CRISTO-HOMBRE.

¡¡¡¡¡¡¡SOMOS NOSOTROS QUIENES NOS OCULTAMOS DE DIOS Y (al hacerlo), GENERAMOS EL MISTERIO!!!!!!!.

En ningún momento Dios es misterioso para con nosotros. Estamos tan acostumbrados, arraigados, “atados” a esta sociedad de consumo que le tenemos “miedo” al hecho de ABANDONARNOS en las manos del Padre para encontrarse con Él y comprobar que...ni Él ni sus designios son un misterio.

¡¡¡¡¡¡¡SI HUBIERA SUFICIENTE AMOR HACIA EL PADRE, NO EXISTIRÍA EN NOSOTROS EL MIEDO!!!!!!!.

Jesús-Cristo nos dio un mensaje (el evangelio del Reino de Dios). Nos pidió que, lo diésemos a conocer a través de la predicación en la Palabra y en los Hechos; era necesario que todo el planeta conociera este mensaje para ser conocedores también, del gran Amor de nuestro Creador y así...salvarnos de una “autodestrucción”.

Él, es “sensible” (también) y no acepta el sufrimiento de sus hijos, “todos” los seres humanos del planeta Tierra pues Dios...no hace diferencias, hace llover y salir el sol sobre “justos e injustos”.

Cristo vino a buscar a aquellos que (todavía) no conocían el Reino de Dios o...a aquellos que SUS RELIGIONES les habían engañado, enseñándoles “doctrinas de hombres” como si éstas fueran de Dios.

Al actuar así, Cristo, no hizo “diferencias” en cuanto a dar a conocer el Reino de su Padre pues, fue en busca de los que “no sabían”.

Respecto a los religiosos, los responsabilizó por la “gran negación” de Dios que habían demostrado al “enseñar equivocadamente” (a propósito) pues, en su enseñanza (por ser ésta engañosa), se genera la “falta” del vínculo del Amor y entonces es, cuando se NIEGA A DIOS MISMO; cuando se le aparta...¡SÍ!...AL MISMO DIOS SE LE ESTÁ APARTANDO; no olvidemos nunca que...Dios es Amor y, en TODO lo que llevemos a cabo con Amor, estamos haciendo uso del mismo Dios para aquel fin.

¡Muchos ignoramos esto!...que cuando Amamos,estamos utilizando a Dios en aquel momento, con las correspondientes consecuencias para todo lo que hay a nuestro alrededor pues...TODO...está siendo “afectado” por esta FUENTE DE ENERGÍA VIVA que es...el AMOR o DIOS.

¡¡¡¡¡¡¡ÉSTA ES LA RAZÓN POR LA CUAL, EL AMOR ES SAGRADO!!!!!!!.

Cuando Jesús dice… “mi yugo es suave y mi carga ligera” o “soy de genio apacible y humilde de corazón”; con un lenguaje muy comprensible; nos pide que actuemos según el “sermón de la montaña” el cual, no es nada complicado o difícil de entender y, en cuanto a llevarlo a cabo, nos recuerda que… “Dios siempre está en nosotros (no con nosotros) para ayudarnos en este proceder”.

Cristo lo único que dice de Dios (su Padre y el nuestro) que podría parecer un misterio es que… “nadie conoce el día y la hora en que vendrá, ni aún los ángeles, sólo el Padre”. Todo lo demás, respecto al misterio de Cristo en la Tierra, es algo muy simple y fácil de entender, además, tenía que ser así pues, su mensaje había de ser comprendido por la mayor parte de la población la cual, poco sabía de letras o escrituras debido a que (como sigue ocurriendo aún hoy en día en un 90% de la población mundial), éstas se encuentran en posesión de “unos pocos para subyugar a unos muchos”.

Cristo no vino a este mundo para hacerles (todavía más) la vida difícil a los más necesitados sino que vino para, “aligerar-les sus grandes cargas” (impuestas, la mayoría de las veces, por sus religiosos).

Jesús-Cristo, era muy simple en sus enseñanzas, preciso y firme (siempre acompañadas del Amor del Padre) por esta razón, las “cosas importantes fueron rebeladas a los pequeñuelos”.

Antes, exponía que...Dios no acepta el sufrimiento de sus hijos, ni injustamente provocado por otros, ni deliberadamente como acto de penitencia, arrepentimiento, etc..

Lo primero suele ser algo involuntario por parte del ser humano que lo sufre, generalmente, siempre es fruto de “ordenes dadas por unos pocos” (pero que afectan a la mayoría) que su proceder, es totalmente ajeno al AMOR DE DIOS.

Lo segundo, es mucho más grave, se atenta directamente contra el AMOR o DIOS...¿Porqué?…

...Nuestro cuerpo, no es propiedad de nuestra mente (que en definitiva es quién le confunde para que reniegue de él mismo), nuestro cuerpo es el Templo de Dios en él...constantemente se está desarrollando el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo y es más...existe en su interior...el altar en donde “se vivifica” EL CRISTO EL HIJO DEL DIOS VIVO.

Por esta razón, el cuerpo es algo sagrado y que tan sólo le pertenece a su Creador, Dios o Amor y que, tan sólo tiene derecho a usarlo nuestra mente cuando lo haga a través del Amor, entonces ella, adopta una actitud HUMILDE y de SUMISIÓN que la caracteriza como fruto de la Creación, en donde TODO, es una viva muestra de DIOS o AMOR.

Datos evangélicos que apoyan lo aquí escrito:

EVANGELIO CAPITULO VERSÍCULO

Juan 10 30

1 9

2 19 al 22

Mateo 10 34

11 25 al 27

13 57

16 16 al 17

17 1 al 5

21 42

22 36 al 40

23 9 al 13 y 33 al 38

24 36

Ikzys…..Elohím…….07-09-1997